Me planteaba el entender esto, de cómo una bolsa de carbón era ecológica, cuando a mí me suponía, no sé, por ignorancia tal vez, lo contrario.
Me preguntaba a la vez si la arquitectura podía ser considerada ecológica o no.
La transformación que hacemos sobre el medio donde fundamos, me hace suponer que no, o que si, que modificamos el ecosistema, eso es una verdad irrefutable. Tal vez debieramos considerar si esta modificación es beneficiosa para el ecosistema o no. Por lo que venimos viendo pareciera ser que no. Esto trataban de hacernos entender nuestros profesores de teoría y método, no con cierta dificultad, sobretodo, cuando era un tema no presente aún en los medios con la fuerza que lo hacen ahora.
Este edificio no utiliza aire acondicionado. Un ingenioso sistema de ventilación, hace ingresar el aire, atravesando una cortina de agua que desprende la fachada por donde ingresa. Paneles solares dispuestos sobre la cara iluminada de día proveen la energía del sol y la reaprovechan de noche.
No pocos problemas tuvieron que resolver para llevar a cabo esta sencilla idea.
Uno de los elementos a considerar fué la resistencia al fuego de sus paneles.
Todo el interior está resuelto siguiendo la misma premisa.
Pero para poder entender esto, de mejor manera, les recomiendo ver al igual lo hice yo en su momento el vídeo de la "National Geographics".
Frente a esto, no puedo decir más que ¡Buen trabajo!
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